Metas y objetivos de sostenibilidad
La guía directa para enfocar los esfuerzos estratégicos de sostenibilidad
Metas claras y accionables
Cuando hablamos de sostenibilidad en una empresa, soñar en grande es fácil: queremos ser carbono neutrales, tener cero residuos, impactar positivamente en las comunidades. Pero convertir esas aspiraciones en un plan real es otra historia. Ahí es donde entra un skill estratégico clave para cualquier consultor en sostenibilidad: saber traducir ideales en metas y objetivos claros.
Definir metas no es el primer paso. Yo recomiendo hacer un buen diagnóstico: análisis de doble materialidad, mapeo de impactos y prioridades. Así, entiendes mejor dónde la empresa genera más valor (y dónde más impacto negativo), tiene sentido aterrizar los objetivos.
Marcos clave
Para que lo abstracto se vuelva concreto te recomiendo seguir estructura sy estándares creados específicamente para crear metas y objetivos alineados a esfuerzos globales y científicos:
ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible):
Son como un mapa global de lo que el mundo necesita. Los 17 ODS permiten alinear a la empresa con desafíos universales como el cambio climático, la igualdad de género o la producción responsable. La ventaja es que conectan la acción empresarial con una narrativa reconocida en todo el mundo. El reto es que pueden sentirse muy amplios: “Contribuir al ODS 13 (Acción por el clima)” suena inspirador, pero no dice aún cómo ni en qué plazo.STBi (Science Based Targets initiative):
Aquí hablamos de rigor científico. El STBi ayuda a definir metas de reducción de emisiones alineadas con lo que la ciencia dice que es necesario para mantenernos bajo 1.5 °C de calentamiento global. Es mucho más específico: no solo dice qué hay que hacer, sino cuánto y para cuándo. La ventaja es que da credibilidad y comparabilidad frente a inversionistas y clientes. El reto es que exige datos sólidos y un compromiso real de la dirección. Como marco, este es un poco más complejo ya que debe establecerse oficialmente aplicado a la institución y la empresa debe ser aprobada.
Cómo se complementan
Piensa en los ODS como la brújula que te orienta hacia el propósito más amplio, y en el STBi como el GPS que te da las coordenadas exactas del camino. Una empresa puede decir: “Nos alineamos con el ODS 13: Acción por el Clima”, y a partir de ahí, comprometerse con un objetivo concreto: “Reducir un 42% de nuestras emisiones de alcance 1 y 2 para 2030, validado por el STBi”.
Por qué importa
Las metas convierten la visión en una hoja de ruta. Y ahí está el valor: transformar ideales inspiradores en logros tangibles. En sostenibilidad, definir objetivos claros es la diferencia entre tener una idea o generar impacto real. Para los consultores, esta habilidad es estratégica porque:
Ayuda a priorizar acciones y evitar dispersión.
Facilita comunicar avances de forma transparente.
Permite hablar el mismo idioma con inversionistas, clientes y reguladores.
Paso a paso
1. Entiende tu punto de partida
Haz un análisis de doble materialidad - tu mapa de riesgos y oportunidades:
Identifica qué temas son más relevantes para tu negocio (financieramente).
Identifica qué temas son más relevantes para tus grupos de interés y el entorno (impacto social y ambiental).
2. Prioriza lo que realmente importa
No se trata de querer cubrir todo. Selecciona 3 a 5 temas clave donde tu empresa pueda generar el mayor impacto positivo y reducir el mayor impacto negativo. Esto evita la dispersión y te enfoca.
Mi recomendación: Elige elementos que estén directamente relacionados a las acciones operativas de tu negocio. El día a día.
3. Conecta con un marco global (ODS)
Ubica esos temas dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Ejemplo: si el análisis mostró que tu mayor impacto está en la cadena de valor agrícola → ODS 12 (Producción y consumo responsable). Los ODS te dan una narrativa reconocida y te ayudan a mostrar que tu empresa está contribuyendo a una agenda más grande.
4. Traduce la ambición en ciencia (STBi)
Cuando el tema es clima y emisiones, usa la Science Based Targets initiative (STBi) para definir metas específicas:
Cuánto debes reducir
En qué plazo
Con qué métricas de seguimiento (Aquí los objetivos se vuelven medibles, comparables y creíbles)
5. Define objetivos SMART
Convierte la visión en algo específico, medible, alcanzable, relevante y con tiempo definido.
Ejemplo: en lugar de “queremos ser más sostenibles”, define:
“Reducir 42% de emisiones Scope 1 y 2 para 2030 (STBi)”.
“Lograr 70% de packaging reciclable para 2028 (ODS 12)”.
6. Conéctalo con la estrategia del negocio
Tus objetivos son el corazón de tu acción. Asegúrate de que estén integrados en las operaciones, en los KPIs del equipo y en los reportes de gestión.
✨ En resumen:
La doble materialidad te dice dónde mirar.
Los ODS te dicen por qué importa globalmente.
El STBi te dice cuánto y para cuándo.
Y los objetivos SMART convierten todo eso en acción concreta